En Santa Fe (Argentina) Mariana, una adolescente de 15 años, huye de su violento hogar. En la búsqueda de su padre biológico, se refugia en casa de una amiga, es conducida a un orfanato dirigido por monjas y encuentra el afecto de un pariente lejano. A lo largo de su viaje, que la lleva al interior de la provincia, descubre su fortaleza interior.