Conoce SANTO DOMINGO en un viaje por su historia lleno de sorpresas y diversión

Fundada por Bartolomé Colón en el año 1496, en el margen oriental del río Ozama, pero trasladada al occidental por Nicolás de Ovando en 1502, debido a su destrucción por un huracán, Santo Domingo fue la primera sede del gobierno colonial español en el Nuevo Mundo.

Sin embargo, cuando los europeos llegaron a esta tierra, ya estaba habitada por los indios taínos. Los indígenas habían dividido las tierras de la isla en cinco cacicazgos y habían plasmado en ellos toda su cultura en forma de arte y utensilios, la cual podrás descubrir en los numerosos museos que hay en la zona. Visita las exposiciones permanentes o temporales del Museo del Hombre Dominicano, el Museo Nacional de Historia y Geografía, la Sala de Arte Prehispánica y Los Tres Ojos, donde quedarás encantado especialmente de la historia precolombina de la isla.

Hoy en día, es la décima ciudad más poblada de América Latina, y la más poblada del Caribe. Es uno de los mayores centros culturales, económicos, políticos, comerciales e industriales de la República Dominicana. Además, su centro histórico, conocido como Ciudad Colonial, fue declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco en 1990. En el Trenecito Colonial (Chu Chu Colonial) podrás dar una vuelta por las distintas calles y contemplar la riqueza arquitectónica del centro histórico.

 

En la ciudad de Santo Domingo, podrás ser testigo de toda una época a través de los diferentes edificios, calles, plazas y parques. Pasea por calles centenarias y contempla las casas coloniales y las fortificaciones que, a pesar del tiempo, mantienen el encanto de los siglos pasados, tanto en sus fachadas como en su interior. Admira los numerosos templos religiosos que aguantan los embates del tiempo y del clima. Visita iglesias pequeñas como la iglesia de Nuestra Señora del Carmen, u otras más impresionantes como el templo de las Mercedes, o contempla la catedral Primada de América y viaja a los orígenes del cristianismo en el Nuevo Mundo.

Los habitantes de Santo Domingo tienen muchos motivos para estar orgullosos de su país, ya que uno de sus mayores logros fue conseguir la independencia de este. Por ello, existen multitud de monumentos, edificios, parques y museos en honor a aquellos que lucharon por ella. Visita el parque de la Independencia, con la puerta del Conde y el Altar de la Patria, o la plaza de la Misericordia, donde se proclamó la independencia. Conoce la Casa de los Trinitarios, donde se gestó, o el Museo Casa Duarte, donde vivieron los principales responsables. O Acude también al Museo Memorial de la Resistencia Dominicana para saber más sobre aquella época tan memorable.

 

La ciudad de Santo Domingo se ha volcado tanto en mantener su patrimonio histórico y cultural como en fomentar a las viejas leyendas y a las nuevas promesas del arte. Así, lugares como el Museo de la Cerámica Contemporánea, el Museo de Bellapart, el Museo de Arte Contemporáneo y el Palacio de Bellas Artes, te darán la oportunidad de contemplar el maravilloso arte dominicano actual.

En Santo Domingo no sólo puedes ver edificios y objetos fabricados por el hombre, también podrás contemplar a la naturaleza en todo su esplendor. Visita el precioso jardín botánico, el zoológico o el increíble acuario, o pasea por cualquiera de los incontables parques de la capital dominicana. Podrás encontrar en el parque Mirador del Este tanto la típica vegetación como la característica fauna de la zona, y, además, conocer el arte precolombino que decora algunas de sus cuevas. También puedes darte un refrescante baño en alguna de las playas cercanas a la ciudad. Las playas Playa Boca Chica, Playa Caribe y Playa Guayacanes te esperan con sus arenas finas y sus cálidas aguas tropicales.

 

Cuando llegue la noche, no podrás evitar bailar al son de la música caribeña, disfrutar de su gastronomía o participar en las tradicionales fiestas que te propone celebrar la ciudad a lo largo de todo el año.

Santo Domingo es una ciudad increíble formada por una peculiar historia, cultura y tradición que no puedes perderte en tu viaje por la República Dominicana.